"Monte del Avila"

"En la cima del mundo con los Poetas"

Después de la increíble experiencia de leer en Lídice, tuvimos algún tiempo libre y Manuel Torrealba, nuestro jefe de Protocolo, nos sugirió que fuéramos al Ávila, que él nos proveería del transporte y que era un lindo paseo, así que convencidos por sus razones aceptamos y nos juntamos Linton Johnson, Naim Araidi, Rabia D'jelti, Brayton Braytenbach, Claude y yo.

Caracas está ubicada en un valle rodeado de hermosas montañas. Al norte del valle se encuentra la parte central de la Cordillera de la Costa, una larga cadena de montañas que se extiende a lo largo de las costas de Venezuela. Este grupo de montañas conforman el Parque Nacional el Avila (PNA), que ocupa una amplia región montañosa de 85.192 Ha. (210.509 Acres); con alturas que varían desde los 120 m. a los 2765 m. (394 a 9072 pies). Sus limites son: al Este las poblaciones de Chuspa y Barlovento, y al Oeste el Norte de Caracas y el pueblo costero de Catia La Mar.

Existen distintas versiones sobre el nombre que originalmente daban los pobladores originales a la montaña, hay quienes aseguran que se referían a ella como Guararia Repano (Sierra Grande) y otros aseguran que el vocablo correcto era wariarepano que significa lugar de las dantas, debido a la gran cantidad de mamiferos de esta especie que poblaban las montañas. En todo caso el nombre actual proviene de los antiguos propietarios de estas tierras; durante la época colonial el tramo central de la silla de caracas fue cedido a Juan Alvarez de Avila, y la gente empezó a referirse a la montaña como Cerro de Avila haciendo alusión a su propietario, el vocablo se arraigó y hoy en día se conoce con este nombre a todo el parque y al pico donde esta ubicado el Hotel Humboldt y el teleférico. Este hotel, es una de las obras de arquitectura mas interesantes y peculiares de Caracas. Las obras para la construcción del Hotel y el sistema de teleférico para llegar a él se iniciaron durante la dictadura de Marcos Perez Jiménez, el arquitecto Tomás Sanabria fue el encargado de dar forma al proyecto que se inauguró a finales de 1.956, constituyendose en uno de los símbolos de la Venezuela moderna. Las instalaciones incluían, varios restaurants y salones temáticos, una pista de hielo, un funicular para transportar a la gente desde la estación hasta el hotel, piscina temperada, etc. El sistema de teleferico incluía una ruta que bajaba hasta las playas del litoral central en Macuto, constituyendose una maravilla de la ingenieria civil que permitía disfrutar de la ciudad, la montaña y la playa en cuestión de minutos.

Posteriormente tanto el teleferico como el Hotel fueron víctimas del devenir politico y cayeron en desgracia, produciendose intermitencias en su funcionamiento, en 1977 ocurrió el primer cierre, fue reabierto en 1986 durante dos años. En 1998 se entrego en concesión a la empresa privada INVERTURCA quienes en el año 2001 inauguraron el Complejo Turístico Avila Mágica. Para ello debió ser necesario reemplazar todo el sistema de teleferico, por uno nuevo diseñado por la empresa Austriaca Dopplemayr y con una serie de modernas cabinas fabricadas por la empresa Suiza CWA. Hoy en día el paseo en teleférico se constituye en una experiencia que tanto locales como visitantes no deben perderse. (Información tomada de http://www.el-avila.com/avila.html)

¿Qué más se puede decir? Ver Caracas desde las nubes es una experiencia mágica y, si se va acompañada de la POESIA y los POETAS, casi indescriptible.